10 consejos indispensables para saber cómo lavar tu auto

Cada vez son más las personas que deciden tomar la limpieza de sus autos en sus manos. Y no es para menos, los gastos por tener un auto ya son bastantes para además agregarle el autolavado.

En la actual época es mejor mantener la limpieza al máximo en el auto. En un artículo anterior te explicamos cómo mantener limpio el interior de tu auto y en esta ocasión te queremos hacer algunas recomendaciones sobre la limpieza exterior de tu vehículo y varios consejos para hacer de esta tarea algo mucho más sencillo.

Lava tu auto siempre en la sombra

La razón es muy sencilla, si tu auto está expuesto a los rayos del sol cuando está cubierto por agua y jabón, es muy probable que el detergente se adhiera a la pintura. Además, con el sol disminuyen las propiedades de limpieza del jabón que estés utilizando.

Una segunda consecuencia de lavar tu auto en el sol, es el desgaste acelerado de los cristales y carrocería por el cambio de temperatura brusco. Con la constante exposición a los rayos del sol, el parabrisas y la pintura de tu auto se calientan y al utilizar agua fría se pueden dañar de más.

Utiliza dos cubetas para lavarlo

En una coloca el jabón, shampoo o el limpiador que estés utilizando, en la segunda coloca agua sola. Remoja la esponja o el trapo en la cubeta con jabón y después de limpiar tu auto, enjuágala en el agua limpia cada vez.

Con ese sencillo truco lograrás que toda la suciedad se quede en la cubeta con agua y el jabón haga su trabajo de forma más sencilla. Por si fuera poco, evitas que pequeños residuos que retiras con la esponja se adhieran a ella y rayen la pintura.

Utiliza toallas de microfibra y jabón especial

Las toallas de microfibra son mucho más suaves con la pintura de tu coche por eso son más recomendables que los trapos de algodón que utilizan la mayoría de las personas.

Un error muy común al lavar un auto es utilizar el mismo trapo con que enceraste tu vehículo en una ocasión pasada. El problema aquí es que los residuos de la cera se pueden solidificar y rayar la pintura de tu auto.

Siempre utiliza shampoo y jabón especial para automóviles. Los productos caseros suelen contener sustancias más corrosivas que van desgastando el brillo de la pintura.

Exceso de suciedad

Después de un viaje largo en el campo nuestro auto termina con demasiado polvo e insectos aplastados por toda la carrocería. Para esas situaciones será mejor que utilices un trapo bañado en agua y lo deslices por encima para reducir la adherencia de la suciedad.

De esta forma no deberás frotar con demasiada fuerza para retirar la suciedad de la carrocería.

Empieza por las llantas

Al lavar un auto, lo mejor será empezar por las llantas. La razón es porque usualmente son las más sucias y no quieres ensuciar parte de la carrocería al lavarlas. Además, si utilizas productos especiales como abrillantadores puedes impregnar la pintura de tu auto.

Después de las llantas continúa por el techo y luego ve descendiendo. Techo, espejos y parabrisas, cofre, cajuela y el resto de la carrocería. De estar forma, la suciedad las partes altas al caer no ensuciará partes ya limpias.

Al momento de enjuagar

Utiliza una cubeta y una bandeja para enjuagar tu auto, ahorrarás agua y podrás estar más al pendiente de no dejar residuos de jabón en la carrocería.

Si utilizas una manguera a presión especial, verifica la distancia a la cual debes apuntar el chorro de agua. Procura no apuntar directamente el chorro a las partes más blandas del vehículo como juntas de goma, plásticos o acrílicos.

Aunque te suene un poco extraño, la mejor forma de secar los vidrios y el parabrisas es usado papel periódico. No deja paño además de ser muy manejable y económico.

No utilices los mismos productos para el interior

El shampoo que normalmente se utiliza para limpiar el exterior del auto es más agresivo a los productos que debes utilizar para limpiar el interior de tu auto.

Actualmente existen productos especiales para el tablero, los asientos y los acabados con protector UV que evitan un desgaste excesivo con el paso del tiempo, además de dejar un brillo natural y sin residuos grasosos.

Aplica la cera adecuada

Pese a ser mucho más fácil su aplicación, las ceras en spray no son las más recomendables pues no ofrecen la protección de ceras en crema. Las del segundo tipo ofrecen una mayor densidad, brillo y protección contra los rayos UV.

En el artículo “Cómo proteger tu auto sel sol” te damos algunos consejos sobre qué tipo de cera debes ocupar para tu auto dependiendo del uso que le des a tu vehículo.

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Pule imperfecciones

Aunque no está directamente relacionado con lavar el auto, pulir las imperfecciones de la carrocería harás más fácil la limpieza de tu vehículo. Los rasguños o raspones que no sean muy profundos puedes repararlos con pastas que fácil aplicación y después pulirlas. Si el raspón es muy profundo, lo mejor será llevarlo a un taller.

Ten en cuenta que sólo debes realizar esta acción cuando los desperfectos sean fáciles de desaparecer y en ese caso no más de dos veces por año ya que la pintura del auto se desgasta y puedes provocar un daño peor.

Invierte en un máquina de vapor

Las máquinas de vapor son excelentes para limpiar los tapetes del auto y varias piezas de tela. Aunque esta herramienta puede ser un poco cara tal vez puedas considerarla como una inversión ya que las vestiduras de tu auto sufrirán menos desgaste.

Si los asientos de tu auto son de piel, también deberás protegerlos con aceites o cremas renovadoras para evitar cuarteaduras.

Cubre tu auto con una lona

Por último, te queremos recomendar, que protejas tu auto con una lona o funda para auto, esto con el fin de protegerlo de los molestos desechos de aves, polvo, hojas secas y el sol.

Al proteger tu auto des esta forma, alargas la vida y brillo de la pintura además de qué, te facilitas la tarea de lavarlo.

Procura lavar tu auto al menos una vez a la semana para evitar que la suciedad se acumule y de adhiera a la pintura. Si mantienes una limpieza constante será mucho más fácil mantener el brillo de la pintura y podrás estar al pendiente de desgaste de reparación rápida.